jueves, 26 de diciembre de 2013

Semana 2. Comentarios



Los Nunne’hi y otros espíritus

Me ha resultado curioso la cercanía con la que tratan los Cherokee a los Nunne'hi , una raza de espíritus inmortales. Que a veces bajan a las aldeas y conviven con los humanos. De igual manera con otros relatos hablan de hadas y seres del agua, el mundo elemental sin duda tiene gran protagonismo para ellos. Los llamaremos de diferentes maneras y contaremos distintas historias pero parece ser que el mundo elemental es muy importante tanto para brujos como para los chamanes.
Al final del relato hablan de un espíritu llamado "El portador del fuego" que dicen que tal vez podría ser una bruja. Me gustaría saber a que llama bruja un Cherokee y si tiene esa connotación maligna que nos ha llegado a nosotros.

Reflexión

Resulta desolador lo poco que a veces nos preocupa el medioambiente. Nos preocupamos por las selvas del Amazonas y no nos preocupamos de cuidar el parque que tenemos al lado de casa. La naturaleza es sabia y no necesita al hombre para sobrevivir pero el hombre sin ella está avocado a la perdición.
Cuidar el medioambiente no es reciclar, y comprar productos ecológicos. Estas cosas pueden servir pero lo que realmente puede ayudar de verdad es tener una mentalidad abierta y respetar al medioambiente tanto o más que el a nosotros. Siendo urbanitas hemos perdido gran parte de ese trato de tu a tu con la naturaleza pero para ello no hace falta ir muy lejos. Lo podemos apreciar en los parques, los árboles o con una simple mirada a la montaña.

Meditación


Como dice Steff apegarnos a las cosas crea miedo. Nos aferramos a las cosas y a las personas como si fueran posesiones, nos crean dependencia y miedo a perderlas. Intentamos coleccionar jerseys, zapatos e incluso amigos. Y esto me recuerda a una máxima que siempre decía mi abuela, no es más feliz quien más tiene sino quien menos necesita.
A veces no se quien soy, la mayor parte del tiempo me sorprendo con la idea que tienen otros de mi. Ese soy yo pero también soy otro Yo que ni tan siquiera yo llego a comprender. El Yo es un ser eterno y quizás necesitemos una eternidad para poder llegar a comprenderlo. 

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